Ciudad Guatemala
¡En espera de una alta dósis latina! Las cantantes se han sometido a intensas rutinas de ejercicio y canto para dar lo mejor de sí en el espectáculo
Con sus volteretas increíbles, vestuario deslumbrante y movimientos de baile feroces, el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl 2020 del domingo, protagonizado por Jennifer López y Shakira, está listo para ser el más sexy hasta el momento.
Esto se debe a que, con 19 álbumes de estudio, más de 155 millones de discos vendidos y un paquete de 12 abdominales entre ellos, las cantantes latinas han tenido dos de los cuerpos más envidiables en la industria del entretenimiento durante las últimas dos décadas.
Al parecer, se han filtrado algunas canciones que interpretarán el próximo domingo 2 de febrero. Entre ellas estarían Get right, Booty, Chantaje y La Tortura.
“Será un espectáculo emocionante”, dijo López, de 50 años, a Entertainment Tonight en septiembre. “Como una explosión”.
La pareja ha estado entrenando durante semanas, ensayando para el gran espectáculo en Miami y compartiendo spoilers en las redes sociales. López incluso publicó un adelanto de un ensayo en la línea de 25 yardas, practicando su mejor movimiento inspirado en el fútbol.
Y para mantenerse en forma, recurren a lo mejor de la ciudad de Nueva York.
Shakira, de 42 años, ha estado entrenando con Anna Kaiser, la fundadora de AKT, un estudio de fitness boutique con cuatro ubicaciones en el área de Nueva York, durante aproximadamente 10 años. En persona, se reúnen al menos cinco veces al año y se aseguran de registrarse semanalmente para ver entrenamientos en video y algunas charlas.
“Shakira está comprometida con el acondicionamiento físico y el bienestar y no solo para estar en forma para un evento específico, sino para que pueda continuar desempeñándose sin lesiones hasta los 40 años y mantenerse saludable”, comenta Kaiser, de 39 años a un medio local.
Mientras tanto, López es conocida por mezclar sus entrenamientos: hace ejercicios cardiovasculares vigorosos, levanta pesas junto a su prometido A-Rod y pasó 6 semanas en un “curso intensivo” de baile en barra, por su papel en “Hustlers”. Ella es cliente del entrenador de celebridades David Kirsch, quien es director de fitness en el exclusivo Core Club en Midtown. Kirsch ha entrenado a J.Lo para numerosas grandes actuaciones a lo largo de los años, incluida su residencia en Vegas durante todo el año en 2016.
“No hay renuncia en Jennifer, ella es hardcore”, Kirsch, le comenta a The Post. “Estaba muy concentrada y muy disciplinada. A los 50 años, tiene un mejor tono muscular que algunos de mis clientes que tienen 25 años “.
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