Ciudad Guatemala
El hombre fue condenado a 80 años de prisión por el asesinato de su exesposa y su pequeña hija de tan solo 7 años.
El Ministerio Público (MP) por medio de la Fiscalía contra el delito de Femicidio logró que David Alfredo Ache Lara fuera encontrado culpable del delito de femicidio cometido contra su ex conviviente Nancy Victoria García Carrera y la hija de ella, Yanira Fernanda García Carrera, una pequeña niña de 7 años.
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Según dictó sentencia el Tribunal de Primera Instancia de Delitos de Femicidio y otras Formas de Violencia contra la Mujer del departamento de Escuintla, Ache Lara fue condenado a 80 años de prisión: 40 años por cada una de las víctimas.
Un crimen resuelto en 48 horas
El trabajo investigativo realizado por la Fiscalía resolvió el doble crimen en menos de 48 horas.
El 02 de noviembre de 2017, en el lote 20 en la 6ª avenida, caserío La Naranjera en el municipio de Masagua del departamento de Escuintla, se inició una discusión entre Ache Lara y su ex conviviente García Carrera quien llegó a visitarlo a su residencia. Aparentemente todo por celos.
La discusión fue tan acalorada que en ese momento Ache Lara atacó con arma de fuego a su ex conviviente hasta provocarle la muerte. La misma acción criminal ejecutó con la pequeña de siete años de edad, a quien también golpeó y a quien también le disparó en el pecho.
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Más tarde sacó a las víctimas de la residencia y las introduce en un vehículo. Dejó el cuerpo de la menor de edad a un lado de la camino, en el kilómetro 74.7 de la carretera antigua que conduce de la ciudad de Escuintla al Puerto de San José.
Ache Lara fue detenido 04 de noviembre, 48 horas después del doble crimen.
Foto: Carlos Paredes, Prensa Libre.
Las pruebas
Durante el trabajo de investigación y de inspección en la residencia del victimario el Ministerio Público localizó casquillos y proyectiles de arma de fuego; latas de cerveza vacías y un arma de fuego perteneciente a Ache Lara, la cual fue secuestrada. Además, los fiscales encontraron manchas de sangre en el baúl vehículo.
Esos elementos fueron fundamentales durante el juicio, para lograr que el victimario fuera condenado a 80 años de prisión.
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