Tecomates eran lo único que tenían y la creatividad les trajo un beneficio

Todo esto es una expresión de la naturaleza, combinan el encanto y el misterio de los secretos escondidos en el patrimonio del arte maya, fusionados con estilo.

Ingrid Gamboa, es una guatemalteca que junto con su equipo de trabajo apoyan a comunidades rurales de Guatemala en donde las oportunidades son escasas, pero gracias a su creatividad e imaginación encontró la utilidad de un recurso natural.

Art Tecomates

En el 2014 empezaron hacer pruebas de preservación y corte para maquinar este producto, también hicieron un sondeo donde encontraron más de 400 arboles por cada 2 kilómetros en el interior del pais.

Fue así como desarrollaron técnicas para enseñarles a los habitantes de como cuidar el árbol de este fruto, como cortarlo y limpiarlo para darle un valor agregado y así posteriormente convertirlo en un revestimiento de tecomate.

El tecomate lo han trabajado en diferentes superficies, aplicándolo en bolsos, en porta vasos y en madera que sirve como decoración de interiores, todo bajo la marca de Art Teco.                                       

Por el momento están incidiendo en Baja Verapaz, Zacapa y Jalapa se trabaja directamente con las fincas de estos lugares en donde convocan a grupos de mujeres para que hagan la recolección y comiencen con el proceso de producción.

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