Los privados de libertad, especialmente del Barrio 18, amenazaron al Sistema Penitenciario que ha tomado medidas de emergencia para resguardar la seguridad. Los pandilleros quieren alimentos, encomiendas, más visitas y hasta piscinas.
La vendedora de 52 años fue asesinada en Guajitos, presuntamente por pandilleros que le cobraban la extorsión que no pagó, según versiones preliminares.