“Me dijo, ‘ya hasta le tengo su sueldo'”: expareja de Arturo Beltrán Leyva dice que detalles le confío el capo sobre su relación con Galilea Montijo
La expareja del narcotraficante Beltrán Leyva ventiló detalles de la relación que asegura que tuvo el capo mexicano con la famosa presentadora Galilea Montijo.
La actriz y conductora mexicana Galilea Montijo, sigue envuelta en la polémica por su supuesto romance con el narcotraficante Arturo Beltrán Leyva, conocido como “El Barbas”, y ahora otra revelación reafirma cuál habría sido el vínculo que ambos mantuvieron.
La relación quedó al descubierto en el libro Emma y las otras señoras del narco de la periodista mexicana Anabel Hernández, lanzado en 2021, donde se asegura que los dos mantuvieron una relación hace aproximadamente dos décadas.
Otra de las revelaciones la hizo Celeste, quien fue pareja de Beltrán Leyva y madre de su hija, quien expuso que ella habría sido testigo de la relación de Galilea Montijo con el capo y que ella recibía un pago mensual del Barbas.
De acuerdo al relato de Celeste, la conexión entre Montijo y el jefe de la droga se inició en la segunda mitad del año 2004.
En ese momento, la vio llegar con el capo a Acapulco y Montijo ya era una celebridad, no solo ganó Big Brother VIP (2002), sino que se había estrenado como conductora de Hoy y había actuado en telenovelas como El precio de tu amor (2000).
“Galilea era todo el tipo de Arturo, no era el top, pero sí era su tipo. Le gustaban muy morenas de piel, así muy mexicanos, rasgos muy mexicanos y Galilea tiene ese tipo. Yo la vi con Arturo”, comentó al expareja del capo.
Detalles de la relación entre Montijo y el capo
En el capítulo ‘La Favorita’, Celeste describió que el capo se la presentó como su novia, no como a otras tantas amigas que tenía: “No, pues ya la traigo de planta”, dijo Arturo a Celeste, “Ya somos novios. Ya hasta le tengo su sueldo”.
“Ahí vi perfectamente a Galilea. Una Galilea muy diferente a la que había visto años antes en el Baby’O. La Galilea que vi cuando Ángel estaba estacionado era un pavorreal. Llevaba un enterizo, un jumpsuit de flores de colores, se veía muy exuberante”, relató. “Para entonces ya se había sabido (dentro del grupo criminal) del pleito con -otra de sus amantes- Lilí Brillanti, ya andaban las dos con Arturo”, narró.
En otra de las conversaciones, según dijo Celeste, Beltrán Leyva la dio detalles de la relación con Galilea.
“Me puse a platicar con Arturo y me dijo: ‘No, pues ya la tengo de planta’, refiriéndose a Montijo.
Celeste le habría dicho que lo quería comprobar y entonces subió a la recámara de él y encontró las cosas de la presentadora. “Ah, cabrón, ya tenemos matrimonio. ¿Y pa cuando el anillo’, le dije. Pero sin celos, más bien como broma. ‘No, pues ya somos novios’, me respondió”, detalló.
¿Le entregaba dinero?
Según las declaraciones de la ex esposa del narcotraficante, El Barbas generó malestar entre los allegados debido a las considerables sumas de dinero que le proporcionaba a Montijo.
“Me dijo, ‘ya hasta le tengo su sueldo’, y eso generó una reacción negativa. Todos estaban molestos (…) Al principio, comenzó otorgándole 200 mil dólares como parte de su ‘nómina’. En este contexto, ‘nómina’ implicaba que le entregaba esta cantidad mensualmente, similar a lo que proporcionaría a su propia esposa, aunque en el caso de Montijo, la cifra era considerablemente menor”, narró.
“Sin embargo, la preocupación radicaba en que este dinero estaba destinado a cubrir sus gastos, como si fuera su esposa”, habría relatado Celeste.
Además, mencionó que El Ghost era la persona encargada de entregar el dinero a Galilea. “Ellos preparaban pequeños paquetes; si se trataban de 100 mil dólares, te entregaban un paquete aproximadamente del tamaño de un kilogramo, ya que más que contarlo, lo pesaban. Al principio, le entregaban dos de estos paquetes”, agregó.
Hasta ahora Montijo no ha dado declaraciones al respecto ni se ha referido al tema.
Cuando se reveló el supuesto romance, al ser publicado el libro Emma y las otras señoras del narco, la presentadora negó cualquier asociación con El Barbas o cualquier individuo vinculado al crimen organizado, prometiendo emprender acciones legales contra la periodista por difamación. Sin embargo, tiempo después según la autora del libro, Montijo no presentó ninguna acción.