“Los Chapitos”: el día en que los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán mataron a decenas de policías por el control del Cártel de Sinaloa
Los hijos de “El Chapo” Guzmán asesinaron a 16 policías en su intento por retomar el control del Cártel de Sinaloa luego de la captura de su padre.
El 30 de septiembre de 2016, un convoy militar fue interceptado por miembros del Cártel de Sinaloa en la carretera que conecta a los municipios de Culiacán y Badiraguato.
Durante este ataque armado, varios integrantes de la organización criminal fundada por “El Chapo” Guzmán resultaron gravemente heridos, entre ellos Julio Óscar Ortiz Vega, alias “El Kevin”.
“El Kevin”, quien quedó detenido por los militares, fue trasladado en ambulancia a Culiacán para recibir atención médica mientras era custodiado por camionetas del Ejército.
No obstante, cuando la ambulancia llegó a Culiacán, los militares fueron nuevamente emboscados por un grupo armado que rescató a “El Kevin” en medio de una ráfaga de disparos.
Este ataque armado dejó un saldo de cinco militares muertos y 10 heridos, así como un paramédico lesionado a raíz de los disparos de los sicarios presuntamente relacionados al Cártel de Sinaloa.
La emboscada registrada en Culiacán fue la antesala de una serie de asesinatos por parte del Cártel de Sinaloa, los cuales tuvieron como blanco principal a policías y militares mexicanos.
En un lapso de seis meses, la organización que en su día lideró Joaquín “El Chapo” Guzmán asesinó a 16 policías mexicanos y sembró terror en el país debido a sus macabras acciones.
¿Cuáles fueron los motivos de estos asesinatos?
Después de la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán, narcotraficante que actualmente se encuentra cumpliendo una sentencia a cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad de EE.UU., el Cártel de Sinaloa experimentó una serie de guerras internas por el control de la organización.
Los grupos enfrentados eran “Los Chapitos”, hijos de Joaquín Guzmán Loera, y la gente de Dámaso López Núñez, conocido como “El Licenciado”.
Algunas versiones extraoficiales indican que el asesinato de los 16 policías mexicanos fue ordenado por los hijos de “El Chapo” tras identificarlos como protectores de Dámaso López, quien traicionó a su padre y se convirtió en su gran rival.
De igual manera, estos reportes revelaron que el rescate de “El Kevin”, aliado de “Los Chapitos”, habría sido llevado a cabo por órdenes de “El Licenciado” para mantenerlo como rehén y utilizar esto en contra de los hijos de Joaquín Guzmán.