Las canciones que escuchaste en el cine pero no supiste su nombre
Hay unas que llegan al alma, que te hacen mover las palmas; otras que llegan al corazón. Es tan famosa esta línea que, aún sin estar viéndote.
Hay unas que llegan al alma, que te hacen mover las palmas; otras que llegan al corazón. Es tan famosa esta línea que, aún sin estar viéndote, puedo asegurar que no solo la cantaste al leerla sino que seguro, segurísimo, coreaste prolongando ese “ooon” final. ¿A que sí? (Se vale sonreír, porque es cierto).
Y es que precisamente las canciones tienen esa fastidiosa costumbre de infiltrarse todo el tiempo, para salir en un suspiro, en un tarareo o en un desamor. Son canciones que se cuelan, como tú en aquel convivio de los cuates.
Pero, ¿qué pasa si esta canción nos es familiar por su ritmo pero su nombre no se nos viene y, peor aún, no sabemos cómo encontrarla porque nos pasamos cantando la misma repetida línea pues solo esa nos medio aprendimos? Es tan frustrante, que recordarlo duele.
Personalmente me pasó una vez con la canción En los espejos de un café de Kairo (para los fresas, como su servidor, amantes de aquellos dramas musicales noventeros y exageradísimos, búsquenla, es muy buena), de la que solo recordaba el ritmo de sus trompetas iniciales. Y pasé medio año buscándola, preguntándole a amigos, familiares y hasta desconocidos, por “aquella canción que inicia tu, turururu tu turu, turuturutururu” en la trompeta. Casi con la gana de contratar a Liam Neeson, para ver si tal vez él la encontraba. ¡Ja! (¡Muy exagerado pues!)
Claro está que eso fue antes del Shazam, que igual no me hubiera servido de nada puesto que no han inventado el Shazam Tarareado, que creo que después de la bombilla de Tesla y el Netflix de Hastings, sería el mejor invento de nuestra era.
Por eso, y por todos los momentos de incertidumbre y estrés, de no saber cómo se llama aquella canción que va “tara tata taaata tara” y sale en tal película les dejo acá algunas canciones que remotamente has escuchado en el cine pero que nunca supiste cómo se llamaban.
WANNABE
Empezamos con una sencilla. Esta canción ya se había popularizado desde su lanzamiento en 1996, pero luego de un lapsus de olvido, resurgió en 2008 por los famosos “lip sync”, cuyo auge iniciaba una moda.
Pero fue en Chicken Little que la canción de verdad resurgió entre los más pequeños, volviendo a recobrar aquella popularidad inicial gracias a esta escena:
La canción se llama Wannabe y fue la encargada de posicionar a las Spice Girls como las número 1, especialmente en el Reino Unido de donde eran oriundas sus creadoras.
ALL STAR
Ya que arrancamos con caricaturas, es menester resaltar a Shrek. Resulta que cuando el ogro más simpático de la televisión está llevando a cabo su rutina diaria de “limpieza”, de fondo lo acompaña una canción muy pegajosa.
La canción es del lejano 1999, compuesta por el grupo de pop-rock estadounidense Smash Mouth. Y aunque esta no llegó al número 1, estuvo muy bien posicionada en las Top 5, por lo que osadamente me atrevería a aseverar que es la más reconocida de dicha agrupación. Es muy pegajosa, ¿no?