Mira cómo los alimentos que consumimos afectan nuestra transpiración
La alimentación es la forma de suplir los requerimientos de energía que necesitamos diariamente y lo que consumimos afecta nuestro cuerpo y transpiración.
La alimentación es la forma de suplir los requerimientos de energía que necesitamos diariamente, y lo que consumimos, afecta de una u otra forma nuestro cuerpo, por eso, no es una excepción que nuestra dieta influya en la manera en la que transpiramos.
Ciertos tipos de alimentos perjudican nuestra transpiración.
En algunos casos, estimulan la producción de sudor y en otros, altera la composición del sudor, generando un olor particular que puede resultar molesto para las personas. En este punto es importante aclarar que la incidencia de la alimentación en la transpiración también depende de la genética, ya que algunas personas se ven más afectadas que otras por la ingesta de algunos productos.
Uno de los alimentos culpables de incrementar la producción del sudor es el chile picante.
Este alimento contiene un compuesto llamado capsaicina, el cual es el responsable del ardor que se siente cuanto ingerimos comidas picantes. La capsaicina a su vez, estimula unos receptores en el sistema nervioso, que engañan al cerebro diciéndole que se encuentra en un ambiente caluroso y cuando esto sucede, el cerebro reacciona y activa su mecanismo de regulación de temperatura, estimulando la producción de sudor. Esta es la razón por la cual muchas personas tienen esa sensación de calor después de ingerir comidas picantes. Estos síntomas se generan principalmente en la cara y cuello.
Más sudor y mal olor
También se puede presentar olor en la sudoración, a raíz del consumo de ciertas comidas como ajo, cebolla, brócoli, coliflor, repollo y espárragos, que se sienten en el aliento y olor corporal de la persona que los ingieren. Cuando se consumen, se descomponen en distintas sustancias azufradas que son secretadas a través de los fluidos corporales, entre ellas el sudor. También los condimentos fuertes como el curry y el comino pueden afectar la química del sudor, incrementando la posibilidad de que se produzca un fuerte olor en las axilas.
Las personas que por predisposición genética sufren de trimetilaminuria o síndrome de olor a pescado, debe, evitar alimentos como la carne, el pescado y los huevos, debido a que no degradan bien estos alimentos y secretan un componente en el sudor que aumenta el mal olor corporal.
Lo anterior no significa que se deba eliminar completamente estos alimentos de la dieta. Lo mejor es mantener una alimentación balanceada y saludable.