Los cambios de clima hacen que la mayoría de las personas tengan enfermedades como gripe, dolor de garganta, tos, entre otras, y surge la duda si para aliviarlas son mejores las bebidas frías o calientes.
Cuando los niños gemelos de Stephanie Elderton pescaron un resfriado, ella nunca se imaginó que uno de ellos terminaría en cuidados intensivos. Pero el resfriado se transformó en bronquiolitis, una enfermedad que generalmente es leve pero, en casos extremos, se puede volver muy grave.
La llama tiene anticuerpos mucho más pequeños que los de los humanos.
Los cambios de estación traen consigo cambios de temperatura impredecibles. Esto ocasiona que nuestro cuerpo no esté bien preparado para afrontar enfermedades.
La gripe española había acabado para 1918 con la vida de entre 50 y 100 millones de la personas, más que en la Primera Gran Guerra.
La alimentación cuando tienes gripe debe ser una dieta ligera, abundante en frutas, verduras y hortalizas, pues resultará más fácil de digerir y nos ayudará a recuperarnos antes de los síntomas.