La herencia de Anabella: Jugosos bonos a los trabajadores del Registro
Es fin de año y mientras para algunas instituciones no pagar el aguinaldo representa un problema, para el Registro pagarlo es tan grave como no hacerlo.
Los sindicatos del Estado son entes privilegiados según se ha destapado en los últimos años que utilizan grandes recursos del Presupuesto Nacional y uno de ellos es el del Registro General de la Propiedad.
Sin duda el desmantelamiento de estructuras señaladas de corrupción han dado un respiro a instituciones cuyas arterias permanecían sucias y bloqueadas.
Pero aunque decenas de órdenes de captura se ha girado a lo largo del 2016. El interés por sostener y mantener los aires de impunidad continúa.
Desde los burócratas que hacen y deshacen con los recursos del Estado, hasta un grupo de empresarios y funcionarios de alto rango que se empeñan en obstruir investigaciones, así lo ha denunciado el propio comisionado Iván Velásquez.
La impunidad en el Registro continúa
Es fin de año y mientras para algunas instituciones no pagar el aguinaldo representa un problema, para el Registro General de la Propiedad, pagarlo es tan grave como no hacerlo.
Un grupo de 62 empleados denominado “Operadores” está registrado bajo el renglón 035, es decir, pago por productividad. Pero además, gracias al Pacto Colectivo heredado por Anabella de León, también obtienen prestaciones del renglón 011.
Luis Felipe Lepe, Secretario Registro de la Propiedad, indicó que se va a convenir al trasladarlos a un renglón permanente.
Además de desembolsar los salarios que están por encima de los que reciben Ministros, Jueces y Magistrados, el Registro debe darles este mes un Bono Navideño que De León dejó estipulado, equivalente a Q1,700. Y por si fuera poco, antes del 15 de enero, recibirán el Bono Diferido, es decir, empleados que ganan 90 mil entre diciembre y enero recibirán: 361,700 Quetzales.
Este no es el único ejemplo de burócratas haciendo piñata con los recursos. Esta semana el Organismo Judicial inventó el bono denominado Bono de Riesgo. A cada uno de los 10 mil 400 empleados les fue pagado 4 mil 400 Quetzales, es decir, sólo en diciembre por este concepto el Organismo Judicial desembolsó 46 millones de Quetzales.
Este dinero extra, no es sinónimo de eficiencia.
Y así, ya sea implícita o explícitamente, las estrategias confabulan para que la corrupción no termine, sólo evoluciona.
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Por Lourdes Hércules.