Un austríaco fue detenido por acusar a un joven sirio de ser un terrorista, lo que provocó su detención por las fuerzas especiales, cuando en realidad el hombre estaba simplemente celoso, informó el martes una fuente judicial.
El hombre, de unos 60 años, había enviado en noviembre un correo electrónico anónimo al ministerio de Interior denunciando a un sirio de 29 años al que calificó como “un comandante” de la organización Estado Islámico y que estaría preparando un atentado en Innsbruck (oeste).
Detienen de inmediato a joven sirio
El sirio fue inmediatamente detenido en una operación de las fuerzas especiales austríaca en esta ciudad del Tirol. Las autoridades lo dejaron en libertad 24 horas después cuando su denunciante admitió haber inventado las acusaciones para impedir que el hombre acompañe a su mujer a una manifestación local.
“El móvil fueron los celos”, indicó a la AFP Thomas William, un portavoz de la fiscalía regional.
El austríaco fue detenido a fines de diciembre en Rumania. Puede ser condenado a cinco años de prisión por denuncia calumniosa.
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